En la era de los dispositivos compactos, nos sumergimos en las maravillas tecnológicas que desafían el dicho: “El tamaño sí importa“. Pero, ¡cuidado! No de la manera que estás pensando
Hace poco más de una semana, nos encontramos cara a cara con el GW-R86S de GoWin. Y, aunque pueda parecer un pequeñín, ¡es un verdadero gigante en potencia! Con un procesador Intel de 11ª Generación, una RAM de 32 GB, y una eMMC de 128 GB, este modelo T4 no juega en ligas menores. Además, no podemos olvidar su impresionante conectividad con tres puertos Ethernet de 2.5GbE, puertos USB, HDMI y capacidad para añadir una tarjeta WiFi M.2 adicional a la integrada y otro conector M.2 más para instalar un super rápido SSD NVMe.
En aquella revisión quedó claro que como SBC admitía sin problema alguno funcionar con Linux (Ubuntu, en nuestro caso) quedando a la altura del NanoPC T6 de nuestros amigos de FriendlyELEC que para nosotros era el mejor SBC que ha pasado hasta el momento por PcDeMaNo.
Entre las ventajas del R86S frente al NanoPC T6 aparte de su increíble conectividad a redes con tres puertos RJ45 a 2,5 GbE (y dos más a 10 GbE en el modelo U) está basado en una arquitectura Intel con potentes procesadores de 11ª generación que se conocen con el nombre en clave “Tiger Lake”.
Por ello igual que el Zimaboard 832 que revisamos el pasado año además de poder con Linux puede con Windows! Eso sí Tiny11 que viene a ser una versión mínima pero totalmente funcional de Windows 11 y que tan solo necesita 8 GB de almacenamiento y 2 GB de RAM.
Ahora bien en el caso del GW-R86S al disponer de 32 GB de RAM, una eMMC de 128GB y un SSD NVMe no hay limitación alguna tanto así que nos hemos permitido instalar en el disco Windows 10, Windows 11 y Ubuntu 23 … manteniendo en el eMMC una versión más anticuada de Ubuntu 22
Por eso, en esta segunda parte de la revisión queremos compartir con nuestros amigos / usuarios / seguidores nuestras impresiones del uso de este fabuloso GW-R86S como un auténtico miniPC. Como siempre intentaremos cuantificar al máximo nuestras conclusiones aunque te adelantamos que desde que lo tenemos es el único que estamos utilizando como PC de “para todo”, tanto para escribir noticias como para hacer revisiones, etc
En la foto os hemos puesto los tres equipos sobre los que actualmente estamos “trabajando” en la casa del pueblo. Os tenemos que confesar que preferimos utilizar el R86S ya que, aunque se refrigera por un pequeño ventilador que suena como un pequeño murmullo no es ni con mucho tan molesto como el del ventilador del Minibook de Chuwi.
Aprovechando que el Apple Watch dispone de un medidor de ruido nos hemos permitido “medir” los decibelios emitidos por el Chuwi, el R68S … comparándolos con el ruido “normal” al utilizar el aire acondicionado que estamos usando día y noche en este abrasador verano.
Una imagen vale más que mil palabras ¿no? A pesar de tomar la medida justo encima del ventilador del R86S el ruido de éste es muy inferior al del Minibook de Chuwi… aunque mejor sería que no sonase nada ¿no?.
Y sin más vamos a resumiros los resultados de nuestras pruebas y tests aunque antes os “enseñaremos” como ha quedado finalmente la instalación de los sistemas operativos.
Instalando Windows… y eligiendo el orden de arranque del S.O.
Recordaréis que en la revisión de la pasada semana partíamos de un RS86S con Ubuntu 22.04 instalado en el eMMC gentileza de la gente de GoWin. Por nuestra parte después instalamos W’10 y W’11 utilizando VENTOY.
Para terminar de incluir cosas decidimos instalar la versión de Ubuntu 23.04 en el disco NVMe de 480 GB que ya hemos llenado.
Así, hasta ayer la pantalla de arranque de nuestro R86S era la que podéis ver arriba. Aunque en esta revisión nos centraremos en el comportamiento del R86S como miniPC funcionando en Windows ya tenemos claro que no queremos para nada disponer de dos Ubuntu en la máquina (ni dos Windows, por cierto). Por eso y para poder realizar pruebas de velocidad en los “discos” hemos formateado la eMMC borrando la versión más antigua de Ubuntu.
Antes de seguir adelante queremos organizar el arranque para que el miniPC se inicie en Windows 11, por ejemplo. Para ello necesitamos “tocar” la configuración del GRUB.
Simplemente es necesario cambiar el valor del GRUB_DEFAULT teniendo en cuenta que el cero corresponde a la primera opción de la “lista”. En nuestro caso si queremos que arranque en Windows habría que poner 4 que corresponde a la 5º opción (Windows Boot Manager).
En el GRUB_TIMEOUT se define el tiempo en segundos que el sistema espera hasta que decidas elegir la opción de arranque siempre que sea un valor distinto de cero. Por ejemplo, nosotros hemos puesto 3 para que el tiempo de espera sea mínimo.
Si recuerdas en la primera parte de esta revisión comentábamos que el tamaño de las letras del GRUB era tan pequeño que no pudimos utilizar el Aurga Viewer. Pues bien modificando el valor del GRUB_GFXMODE de 640×480 a 800×600 el tamaño de la letra se vuelve visible
Para que los cambios se hagan efectivos basta con hacer un update-grub, momento que aprovecha para revisar los sistemas operativos que tuvieses instalados.
Así en nuestro caso, al haber quitado el primer ubuntu creado se ha simplificado el menu de opciones de arranque que ahora ha quedado así.
En cuanto a la selección entre los dos Windows instalados en lugar de utilizar GRUB (aplicación de Linux) se utiliza el Windows Boot Manager como seguro ya conoces.
Windows 11 en el GW-R86S
A pesar de las “limitaciones” que pone Microsoft para la instalación de su último sistema operativo (todo sea por la seguridad) no hemos tenido problema alguno en instalar W’11 Pro ya que este R86S dispone de TPM 2.0
Una cosa, cuando menos, curiosa es que según Intel la máxima memoria RAM instalada que admite su procesador N6005 es 16GB mientras que nosotros tenemos 32 GB y parece que funciona ¿no?.
Como es lógico si la instalación de W’11 no nos ha dado ningún problema tampoco lo ha hecho la de W’10 y que muy probablemente quitaremos en los próximos días ya que no la usamos desde hace tiempo.